Colombianos: carne de cañón en Ucrania
#Reportaje
18/10/2024
Por: José Vargas
A casi tres años del inicio de la guerra en Ucrania, un conflicto tan distante como indiferente para la realidad de Colombia, las cifras del impacto humanitario están lejos de mostrar su verdadera cara. Desde los primeros meses del 2024 empezaron a sonar con más fuerza las noticias de colombianos en las filas del ejército ucraniano, para algunos sectores son mercenarios, para otros son legionarios. La diferencia, aunque semántica, no oculta el drama de sus familias que se quedan en el país y de ellos mismos en un campo de batalla cada día más violento.
Hablar de la cantidad de muertos de los dos bandos es una tarea casi imposible, es una guerra que se desarrolla ampliamente en los medios de comunicación, sobre todo en la prensa corporativa. La apuesta política de occidente de debilitar a Rusia, incluso hasta fragmentarla, es enorme y la Organización del Tratado del Atlántico Norte – OTAN no puede verse como la parte que va perdiendo ante el mundo. Ahora bien, Rusia sabe que es una guerra decisiva, es su futuro e influencia sobre Europa lo que está en juego, por lo que también hacen sus cálculos amañados para no verse como el lado con más bajas.
El gobierno ruso fue el primero en hablar de una serie de hombres de diversas nacionalidades que estaban combatiendo con las tropas ucranianas, inicialmente se reportaban estadounidenses, canadienses, ingleses, franceses, alemanes, polacos y de otros países, principalmente miembros de la OTAN. Con el paso del tiempo apareció el nombre de Colombia en los boletines de prensa, primero internacionales, hasta que la noticia empezó a hacer eco al interior del país sudamericano.
Algunos familiares de colombianos desaparecidos, muertos o heridos en Ucrania coinciden en algo, se van por falta de oportunidades en el país. Casi todos son exmilitares pensionados o que voluntariamente pidieron el retiro antes del tiempo para la jubilación. Tras la salida de las Fuerzas Armadas no se han logrado incorporar en la vida civil, unos terminan trabajando como escoltas, en vigilancia privada, en el comercio, desempleados o como agentes de seguridad, especialmente en países del Medio Oriente.
Ante un contexto desalentador de baja adaptabilidad a la vida civil, la propuesta de Ucrania es muy atractiva. La convocatoria llega por excompañeros del Ejército, son los que tienen la información preliminar y en muy poco tiempo salen de viaje. Madrid es la puerta de entrada y de allí el tránsito es hasta Varsovia, en Polonia y en pocos días alcanzan Kiev, ciudad en donde buscan las oficinas de las llamadas “legiones” o de los centros de reclutamiento. Hasta allí se deben cubrir todos los gastos, como el pasaje aéreo, hoteles y alimentación, posteriormente ingresan a las guarniciones militares en donde reciben un breve reentrenamiento.
La Cancillería de Colombia el pasado 7 de junio de 2024 reportó que había recibido más de cincuenta solicitudes de personas afectadas en el conflicto siendo parte de las hostilidades, aunque en ese reporte oficial no aclaró la cantidad de muertos o heridos. Sin embargo, Roy Barreras, embajador de Colombia ante el Reino Unido, declaró que se calculaba en 200 el número de nacionales en las filas ucranianas y 51 muertos en el conflicto. En marzo de 2024 la embajada rusa en Ciudad de México en una conferencia de prensa informó que sus fuentes de inteligencia han establecido que unos 13.387 mercenarios de todas partes del mundo han combatido desde el bando ucraniano, de ese total unos 5.962 han muerto.
Para el gobierno ruso Colombia es el tercer país de América con mayor cantidad de mercenarios en el ejército ucraniano, la cifra la han logrado establecer en 430 combatientes, de los cuales 217 han muerto. Para Rusia Colombia es el séptimo país con más soldados y el quinto con más víctimas en la guerra. La anterior información dista bastante de las cifras oficiales del gobierno de Colombia.
Así mismo, las denuncias de las familias y de los mismos mercenarios colombianos sobre la lamentable situación que viven en el frente de batalla y del maltrato por parte de sus compañeros ucranianos ha venido creciendo. En redes sociales los videos con testimonios son numerosos, aunque se deben observar con discreción y al mismo tiempo dudando sobre su autenticidad y veracidad en las declaraciones. Por ejemplo, en el siguiente video un colombiano dice que la guerra es desigual, habla de la desproporción de fuerzas entre ambos ejércitos, afirma que muchos colombianos han muerto y sus cuerpos no han sido recuperados, que están casi abandonados e insta a sus compatriotas a no ir a luchar a Ucrania.
Mercenario colombiano dando
testimonio desde algún lugar del frente. Por el tipo de vegetación el video se
grabó entre junio y agosto (verano) aparentemente de 2024.
Cuando surgieron las denuncias de maltrato se conoció un video en el que militares colombianos manifiestan que fuerzas de seguridad del régimen de Kiev ingresaron a su alojamiento a golpearlos, que su comandante Iván Vovk al parecer guarda silencio ante los hechos y hasta se escucha una voz que dice que los ucranianos son peores que los rusos. Uno de estos archivos audiovisuales que más ha llamado la atención es una grabación de poco menos de un minuto, en el que aparentemente un grupo de soldados colombianos rescatan a un compañero al que llaman “Felipe” que había sido amordazado por sus pares ucranianos.
Video que muestra el
aparente maltrato de un oficial del GUR (Dirección Principal de
Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania) fecha y lugar no
determinados.
Video que muestra el aparente
maltrato a un colombiano que se habría negado a combatir. Grabado en el verano,
posiblemente del 2024. Lugar no determinado.
Los videos también muestran a algunas personas muy jóvenes, entre los 20 a 30 años de edad, que quizás pasaron un tiempo en el Ejército de Colombia antes de enlistarse en Ucrania. En otro de ellos un hombre dice que cuando regresan de las operaciones lo hacen incompletos, haciendo referencia a que mataron a uno de sus compañeros al que llaman “Felipe”. En otro se ve lo que pueden ser cuatro cuerpos en bolsas plásticas y que se identifican como “Hitman”, “Caquetá”, “Mortal” y “Barbas”.
Finalmente, en uno de los videos se escucha a varios hombres con acentos claramente identificables de Colombia, es una secuencia que muestra los momentos al caer bajo fuego de la artillería rusa, quedando completamente inmovilizados, preguntando qué deben hacer, buscando al intérprete hasta que logran salir encima de un vehículo blindado.
Imágenes de colombianos
emboscados por tropas rusas en la zona del Donbás. Verano 2024.
Cuando uno de estos mercenarios muere empieza el drama para las familias en Colombia. En muchos casos el proceso para la recuperación del cuerpo por parte de las propias fuerzas ucranianas puede tomar días o semanas, luego inician las labores de identificación, lo cual también tarda tiempo debido al estado de los restos, en ese punto las familias quizás ya sospechen sobre la suerte de su ser querido debido a la falta de comunicación; finalmente viene el proceso de repatriación, el cual puede valer entre 20 a 30 mil dólares, de 80 a 100 millones de pesos.
En Colombia un soldado profesional recibe entre un millón trescientos mil pesos y un millón seiscientos mil pesos mensuales, mientras que en Ucrania devengan 120 mil grivnas, el equivalente a unos 12 millones de pesos colombianos, esto de acuerdo a lo declarado por un colombiano vinculado en este conflicto en diálogo con Caracol Radio en febrero de 2024. No es claro si ese dinero es entregado en efectivo en Ucrania, o si tiene posibilidad de enviarlo al país por partes y, lo más importante, qué sucede con las pertenencias del soldado una vez muere.
El conflicto está entrando en lo que parece ser una ofensiva general en todo el frente por parte de Rusia, las recientes noticias dan cuenta que las principales fortificaciones ucranianas en el Donbás han caído y que el ejército ruso avanza tomando pueblos y ciudades cada semana. Así mismo, la incursión ucraniana el Kursk (territorio ruso) parece estancada o en retroceso para las tropas ucranianas, esto mientras se escuchan rumores que desde Kiev ya se preparan para una negociación que no será del todo favorable para el régimen de Zelenski y que, en todo caso, cuando se firme la paz, muchas familias en Colombia seguirán sin respuesta de sus seres queridos.